Todo comenzó con palabras:
En Juan 1,1 leemos:
"Al principio existía la Palabra,
y l aPalabra estaba junto a Dios,
y la palabra era Dios"
Las palabras son y han sido la fuerza creadora del universo:
Las primeras palabras del Creador
de las que tenemos constancia,
"hagase la luz",
confirman el poder iluminador de las palabras:
Utilizadas de forma adecuada y positiva,
las palabras constituyen el fundamento del éxito
y la paz interior;
nos proporcionan la visión y la concentración
necesarias para encontrar el camino
hacia el crecimiento y la aportación:
Utilizadas de forma inadecuada y negativa
pueden socavar nuestras mejores intenciones.
Esto es aplicable a los negocios,
a las relaciones personales
y a todos los ámbitos de la vida:
Existe un lenguaje de éxito
y un lenguaje de frustración;
un lenguaje del proceso y un lenguaje del retroceso:
Las palabras venden,
y las palabras repelen;
las palabras nos conducen hacia adelante,
y las palabras nos impiden avanzar;
las palabras sanan
y las palabras matan...
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