"Cuando era niño, dentro de mucho tiempo en el futuro,
leí un poema.
Me pregunto si te gustaría"
Arturo hizo como que dormía,
siempre que Merlín hablaba del futuro como su pasado,
el muchacho sentía la necesidad de concentrarse mucho más
para no perder el hilo.
"No trates de hacer caso omiso a lo que digo",
prosiguió Merlín, "porque este poema es demasiado bello
para dejarlo pasar:
Qué tal si durmieras,
y que tal si,
estando dormido soñaras?
Y qué tal si,
en tus sueños volaras al cielo
y de allí trajeras una rara y bella flor?
Y qué tal sí, al despertar,
tuvieras esa flor en tu mano?
Qué pasaría?"
Mientras estamos despiertos
mantenemos la atención fija sobre los objetos
y los sonidos del mundo material,
de modo que es fácil suponer que el cuerpo físico
es el único que poseemos.
Qué es un cuerpo?
Según la definición más amplia,
es una colección de células que funcionan conjuntamente
para formar una unidad más grande.
Siendo mucho más grande que las sumas de sus partes,
un cuerpo puede actuar, pesar y sentir
de una forma que le sería imposible hacerlo
a una sola célula.
Todos los días experimentamos sentimientos
que son como células sueltas;
si los reunimos todos,
tendremos un cuerpo emocional.
El cuerpo emocional es, ante todo,
una historia viva de todas las cosas
que nos agradan y desagradan,
además de nuestros temores, esperanzas, deseos, etc.
Si nuestro cuerpo emocional pudiese presentarse en un recinto,
nuestros amigos nos reconocerían inmediatamente,
puesto que el cuerpo emocional aporta
una gran parte de nuestra identidad.
Hay otros cuerpos también invisibles,
que agregan a nuestra singularidad.
Está el cuerpo de conocimiento
que ha venido creciendo desde nuestro nacimiento,
al cual llamaremos cuerpo mental.
El conocimiento es más sútil que las emociones,
puesto que está constituido por conceptos abstractos.
Pero más sutiles todavía son las razones que tenemos para vivir,
las creencias profundas sobre la existencia y la naturaleza de la vida
--- todas ellas almacenadas dentro de nuestro cuerpo causal,esa parte de nosotros que nos permite comprender la existencia.
En él residen las semillas más profundas
de la memoria y el deseo.
Todos esos cuerpos son únicos en cada persona.
Una vez más, si nuestro cuerpo mental o causal
pudiese presentarse en un recinto,
seríamos identificables inmediatamente.
Por lo tanto la identidad
-- el sentimiento de ser "yo"--
emana a partir de nuestra consciencia de esos cuerpos.
Un mago sabe que esa luz fluye desde el cuerpo más sutil
hasta el más concreto.
El "yo" con el cual nos identificamos
tiene origen primero en nuestras creencias
y razones para vivir (cuerpo causal),
las cuales dan lugar a las ideas (cuerpo mental)
y a los sentimientos (cuerpo empcional).
Sólo al final de la secuencia
el cuerpo físico recibe el impulso de la vida.
Como decía Merlín:
"Los mortales creen que son máquinas físicas
que aprendieron a pensar.
En realidad son pensamientos que aprendieron a crear una máquina física."
En términos prácticos,
este conocimiento tiene implicaciones enormes.
Si usted supone que es ante todo un ser físico,
vivirá la vida de manera muy diferente
de quien supone que es ante todo
un ser sutil.
(Gracias http://magnasofia.blogspot.com/ por la imagen!)
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