Un buscador espiritual,
discípulo de un reconocido lama tibetano,
tenía intenciones de realizar un retiro para meditar.
Sin embargo,
como siempre había meditado en compañía de otros,
y con la guía espiritual de un maestro,
no sabía exactamente qué técnica aplicar
en un retiro.
Le preguntó al lama:
-- Maestro, he decidido intername en el bosque
para hacer un retiro espirirual.
Podrías indicarme alguna técnica
meditación?
-- Con mucho gusto te ayudaré.
Es una gran idea que intentes hallar
la paz necesaria para meditar en el bosque,
aunque recuerda siempre que la paz
debe estar siempre en tu mente.
Pero no voy a darte una técnica especial
de meditación;
simplemente sigue este consejo:
puedes pensar en lo que quieras,
excepto en monos.
El joven feliz con el consejo de su maestro,
se retiró al bosque.
Se sentía contento porque consideraba que,
habiendo tantas en las que pensar,
seguramente podría cumplir
con el mandato del lama.
Además, nunca antes se había dentenido,
a pensar en monos, así que ,
por qué hacerlo ahora?
Estuvo unas semanas en el bosque
cumpliendo su retiro.
Al regresar, fue a ver al maestro.
-- Cómo te ha ido en el retiro espiritual?
Has logrado purificar tu alma
con la meditación?
-- No exactamente, maestro.
-- reconoció el estudiante --
No he logrado pensar en nada
que no fueran monos.
A cada instante,
los monos estaban en mi mente.
Ha sido una pesadilla.
0 comentarios:
Publicar un comentario